domingo, 8 de octubre de 2017

"La siesta o Escena pompeyana"

LA SIESTA O ESCENA  POMPEYANA






   Autor:Sir Lawrence Alma Tadema
  Fecha: 1868
  Museo: Museo del Prado
  Características:130 x 360 cm
  Técnica: Óleo
  Procedencia: Donación Ernesto Gambart,1887.



Lawrence Alma Tadema


Alma Tadema, Lawrence (Dronryp, ­Holanda, 1836-Londres, 1912). Pintor británico. Su nombre original era Lourens Tadema. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Amberes entre 1852 y 1857 y fue discípulo de Hendrik Leys. Se le puede considerar uno de los pintores más famosos del periodo victoriano tardío.
De estilo difícilmente clasificable, Alma Tadema es, a la vez, prerrafaelista, academicista, post-romántico, decadentista y neoclásico. Su obra tiene concomitancias con la de artistas ingleses como Waterhouse, Leighton o Rossetti, todos ellos pertenecientes a la pintura inglesa de finales del siglo XIX.
De hecho, Alma Tadema adquirió la nacionalidad británica y se convirtió en un pintor victoriano.Sus primeras obras se inspiraron en la historia de los francos y los merovingios
En 1862, a raíz de un viaje a Londres en el que conoció sus mu­seos, cambió su repertorio por escenas del antiguo Egipto. Se casó en 1863 y pasó la luna de miel en Italia, donde hizo numerosos apuntes y fotografías, especialmente en Pompeya y Herculano. La Antigüedad clásica sería, a partir de entonces, su tema preferido. Sus pinturas ofrecen una visión de la Grecia y la Roma antiguas: en ellas representa bellas mujeres y preciosas escenografías, llenas de mármoles. Emana de ellas una gran sensualida
En 1864 conoció en París al marchante Ernest Gambart, quien dio a conocer sus obras en Bruselas y en Londres. En 1870, a raíz de la muerte de su primera mujer, se trasladó a Londres.
Un año después se volvió a casar con la ­artista Laura Epps y adquirió la nacionalidad británica. Sus amplios conocimientos de la arqueología, la arquitectura y el arte de Grecia y Roma le ­permitieron reconstruir detalladamente las escenas cotidianas de la ­Antigüedad clásica y adaptarlas al gusto victoriano. También hizo retratos y diseñó espectaculares decorados de teatro, muebles y trajes. Vivía tan inmerso en la estética clasicista, que sus dos residencias en Londres fueron decoradas como palacios pompeyanos. Alcanzó gran éxito entre los británicos y ejerció una extraordinaria influencia en Hollywood, especialmente en los decorados de las películas de los directores de cine David W. Griffith y Cecil B. DeMille.
En 1876 fue nombrado asociado de la Royal Academy londinense, en 1879 académico de número y en 1905 fue condecorado con la orden del Mérito. En 1887 Ernest Gambart, que entonces era cónsul de España en Niza, donó el lienzo que custodia el Museo del Prado, Escena pompeyana (la siesta), pintado como un friso, al estilo de la cerámica de figuras rojas, e inspirado en la Hélade romántica de los parnasianos, visión poética y hedonista anhelada por Théophile Gautier, Louis Ménard, Leconte de Lisle o Baudelaire. El óleo describe una escena de indolente y plácida sensualidad homoerótica en la que un anciano reclinado y un joven tumbado, tal vez maestro y discípulo, disfrutan, bajo la protección de Venus, de la música que extrae de la flauta una bella joven.

Escena Pompeyana o La siesta 1868
Olvidado durante décadas en una época en que las vanguardias y los istmos hacían furor en Europa, su obra ha recibido un nuevo interés por parte del público a partir de los años setenta del pasado siglo, sirva de ejemplo que cuadros como El hallazgo de Moises (1904) no halló comprador en estos años. Sin embargo, el mismo cuadro se vendió en 1995 en la sala Christie´s de Londres por 1.562.500 libras y en 2010, de nuevo subastada esta vez en Sotheby´s, por 35,9 millones de dólares. Sus lienzos, escapistas, sin duda, nos trasladan a un pasado hedonista, lleno de luz y sensualidad, y constituyen un verdadero goce para los sentidos.
 El pintor que ayudó a Hollywood.

 Lawrence Alma-Tadema reflejó el mundo antiguo con tanto detalle que Cecil B. DeMille y otros directores de cine se inspiraron en sus obras.
Fue el retratista de la elegancia clásica.
Sus primeras obras se inspiraron en la historia de los francos y merovingios;después se centró en el antiguo Egipto, hasta que la antigüedad clásica se convirtió en su tema preferido. Alcanzó fama internacional: sus espectaculares decorados influyeron  en el cine de Holllywood. Sobresalió por su habilidad en pintar flores y superficies reflectantes como metales, cerámica y, sobre todo, mármol. La elegancia de sus escenas arcaicas cautivó en la época victoriana.

1. El formato:monumental.

     " La siesta o Escena pompeyana" tiene un formato poco usual: mide 130 por 369 centímetros. Las figuras son enormes, de escala superior a la humana. El autor quiso emular los frisos griegos y romanos y pensó la obra como primera pieza para decorar una gran vivienda burguesa. La antigüedad clásica se convirtió en el el tema preferido de Alma-Tadema desde que pasó su luna de miel en Italia. Allí realizó muchos apuntes y fotografías especialmente en Pompeya y Herculano.


2. Los protagonistas: amantes tras un banquete.

   El hombre que reposa en el lado izquierdo podría ser un  "erómeno", así se llamaba a los jóvenes que mantenían relaciones amorosas con  hombres mucho más mayores que ellos, denominados "erastés" y que, generalmente eran personajes de la alta sociedad, individuos influyentes en la vida social y política. La obra muestra una escena tras un banquete, con la pareja de hombres disfrutando de la música de Afrodita, que, además, les ofrece su protección.


3. El color: natural y relajante.

     La armonía que transmiten los retratados también se refleja en la paleta, que, sin perder el brillo de los tonos, se limita a colores naturales.No hay sorpresas ni sobresaltos, la atmósfera es tranquila, sin estridencias ni colores chillones. El marrón de los cojines, por ejemplo, convive perfectamente con el rojo pálido de las flores o con el azul verdoso de la manta. El fondo neutro- de un ocre uniforme- ayuda a que incluso la pincelada más discreta no se pierda en la armonía de la composición.


4. La composición: dividida en dos.


        La escultura que está sobre la mesa- al lado del jarrón- divide el cuadro en dos mitades, muy parecidas en cuanto a espacio pero con mayor protagonismo para la parte izquierda. Los dos hombres tumbados también marcan una línea divisoria, en este caso, de manera horizontal. Esta marca se rompe de forma abrupta con la irrupción de la figura de Afrodita en un plano más cercano y tocando la flauta doble: hacia ella se dirige la mirada de los hobres y, además, la del espectador.


5. La música: la flauta doble.


    La pintura llegó al Museo del Prado como donación del marchante de Lawrence Alma-Tadema, Ernest Gambart, personaje que tuvo mucho peso en el mercado del arte, pero fue acusado de conductas inmorales y tuvo que renunciar a su condición de diplomático. La obra muestra a la diosa Afrodita tocando la flauta doble. El instrumento, probablemente hecho de hueso de ciervo, tenía una gran importancia en una época en la que se creía que la música tenía un origen divino.


6. El bodegón: casi una foto.


     El pintor poseía amplios conocimientos sobre la vida en Grecia y Roma, muy útiles para reconstruir escenas cotidianas de la antigüedad clásica con realismo y detalle. Directores de cine como Cecil B.DeMille, en  Los diez mandamientos, o Ridley Scott. en Gladiator, consultaron sus obras para ambientar  las películas. Casi fotográficas parecen las uvas y las rosas antiguas con los pétalos esparcidos por la mesa o el esponjoso trozo de  pan desmigado que el artista muestra en su obra.